Lalo es un treintañero que vive en Oaxaca, en una ciudad montañosa del sur de México, donde trabaja en una fábrica. Sin embargo, tiene una segunda vida como influencer sexual a espaldas de sus padres y tampoco saben que es seropositivo. Lalo se pasa todo el tiempo desarrollando diferentes personalidades en la red y entre medias hace una prueba para una película porno. "¿Por qué quieres hacer porno?", le preguntan a lo que contesta: "Porque me gusta que me vean". Este filme reflexiona sobre los límites de la intimidad en una época en la que la vida cotidiana y la subjetividad se han convertido en un espectáculo a los ojos de los demás.