La película The Girl Who Got Away (Michael Morrissey) está ambientada en la ciudad de Nueva York en el año 1998 y es la historia de un asesino capturado después de aterrorizar a la ciudad durante más de diez años, ya que llego a secuestrar a cinco niños a los que convenció que eran sus hijos para criarlos y llamarlos suyos. Sin embargo, una niña, Christina Bowden, logra escapar de su encierro y salvarse. Después de veinte años en prisión, Caulfield ha escapado de prisión y está decidido a encontrar a Christina y terminar lo que comenzó hace veinte años.