Susanne (Signe Egholm Olsen), la protagonista de El último paciente es una mujer distinta al resto del mundo y que ha decidido entregar su vida a las demás personas. Por ello, estudió psicología y se convirtió en una de las psicólogas más reputadas de Dinamarca. Sin embargo, su vida se convierte en una horrible pesadilla cuando recibe un nuevo encargo. Su nuevo paciente (Anton Hjejle) es en realidad uno de los asesinos en serie más buscados del país y la ha convertido en su nueva obsesión.