Los amish son una comunidad religiosa cristiana que se ha hecho conocida, entre otras cosas, por su rechazo a la tecnología moderna. Antes de que los jóvenes amish se comprometan a unirse a la comunidad religiosa hasta la edad adulta, disfrutan de un tiempo especial de libertad y suelen utilizar esos momentos para explorar el mundo. El joven amish Jacob (Jonas Holdenrieder) aprovecha esta oportunidad cuando se marcha a Berlín y rápidamente se da cuenta de que la vida de privación en la comunidad religiosa no le ha preparado muy bien para la gran ciudad.